Temporada 1 | Episodio 44
Marie Durand pasó 38 años en la cárcel y su único delito fue su fe protestante. Todo lo que tenía que hacer para ser liberada era decir dos palabras: "Me retracto", algo que se negó a hacer. Su justa resistencia es un ejemplo de una persona normal y corriente que se enfrenta con determinación a la injusticia.